Ubicada en Nuñez, esta parrilla se jacta de asar dos toneladas de carnes al mes. Asado criollo tradicional, toques excéntricos y un maestro asador al frente del negocio.

“El que viene acá va a comer un buen asado y cocinado por mí. Cocino casi todos los días”, dice Carlos López, dueño de Checho y fundador de la Escuela Argentina de Parrilleros.

“Empezamos con mi viejo en el año ‘77, yo tenía 20 años sin saber mucho del tema y nos fuimos haciendo profesionales. Pasaron los años y acá estamos, con todos los embates de tener un negocio en Buenos Aires, seguimos abiertos e ininterrumpidamente”, dice Carlos mientras dirige a sus empleados en los preparativos mañaneros.

Desde Maradona y Monzón, Checho ha recibido toda clase de visitas ilustres y es que Carlos tiene un feeling especial con los medios de comunicación, un “no se qué” con las cámaras que lo convierten en un personaje único a la hora de transmitir su pasión por los asados.

Checho presta servicio ininterrumpido de lunes a lunes menos domingos a la noche, que es el único momento de pausa. Con una capacidad para casi 200 personas, la parrilla está a la vista en el jardín el cual se completa con una glorieta para volverse locos. Nochecitas de verano, no tienen un escenario mejor.

Se hace chivito, cordero y costillar y se puede pedir por corte y parrillada, “Es una parrilla clásica. Acá se asan casi dos toneladas de carne al mes”, agrega López. “Lo que más sale en una parrilla clásica son los cortes parrilleros, asado de tira, chorizo, molleja, chinchulín y bife de chorizo, por supuesto. Atrás le sigue todo el resto”.

“Yo siempre hago especialidades y voy cambiando. En Checho se pueden comer platos muy exclusivos como pulpo a la parrilla o cochinillo. “El cochinillo es un chanchito de 3 kilos de 22 días de vida que no haya comido nada”, dice Carlos y remata: “No lo hace nadie en Buenos Aires”.

    Tips La Mejor Parrilla

  • *Los fines de semana hay asado a la estaca.
  • *Se aceptan todos los medios de pago, inclusive tickets.
  • *Hay menúes ejecutivos y platos para compartir.